1.-
SEÑOR...
2.- IMAGEN
3.-
CUENTO
4.- EL CANCEROSO
5.- ACUARIO
6.- DOCUMENTO PSIQUIÁTRICO
7.- YO SOY COMO LAS PLANTAS
8.- NO HAY NADA QUE AGREGAR
9.- VIVIMOS LOS DÍAS
10.-
SOY SÓLO PROFESOR
11.-
ESTÁ BIEN
Señor
dime si existes
te pregunto en la noche
del desamparo y la amargura
mientras mis propios demonios
me clavan
a esta cruz invisible
con los horribles martillos
de la culpa
En mi estanque
interior,
tu imagen no se borra.
Tu propio viento a veces,
riza el agua
y son también hojas tuyas
las que caen,
pero tus ojos no se deforman.
Es posible que ya nada suceda
entre nosotros.
Ahora, la
tarde entera
es el estanque,
huye una gaviota
hacia otros mares
y es tu sonrisa
la que parte
y es tu mirada
la que parte,
pero tus ojos nunca se deforman.
La brisa vespertina
viene acariciando los ciruelos
tenue
imperceptible
muda
hace llover pétalos lentos
las graves palmeras son columnas
con capiteles de abanico
catedrales inconclusas
sin incienso
sin monjes
y sin ritos
me he puesto triste
sin quererlo
para ahuyentar el llanto
les contaré a los pájaros un cuento
yo quise ser un día un tallo largo
muy robusto
y muy alto
adherido a mi tronco
hubiera ascendido al mundo
hasta los astros
quise ser el árbol más grande
de la tierra
florecido en otoño
en invierno
en estío
en primavera
tan alto habría sido
que por flores tendría
las estrellas
ahora estoy aquí
me observo
nada tengo
aquí termina
el cuento
desde todos los puntos
han corrido hacia mí
todas las penas
se me desploma el pensamiento
bajo la tierra
irremediablemente triturado
soy una débil raíz
hecha de nervio
El canceroso
aunque con algunos dolores
disfrutaba de sus últimos días
una inyección por la mañana
dos o tres por la tarde
algunos amigos
con sus rostros especialmente acomodados a las
circunstancias
irrumpían en su habitación
se conversaba del tiempo
de los increíbles progresos de la ciencia médica
de lo mejorado que estaba el semblante del
paciente
de los proyectos de la reforma agraria
de los conflictos entre marxismo y capitalismo
de los últimos viajes espaciales
a lo que el canceroso respondía
con un discreto silencio
ya que él
a través de la ventana
observaba un ciruelo florido
Mi infancia
es un acuario inaccesible
un ebrio país de trompos y palomas
al que es preciso llegar con traje blanco
en una mañana azul
de sol volcado
yo no daría ya con los caminos
pero recuerdo algunas cosas
bandas de circo
en tardes de novena
noches de riñas y cansancios
dando conmigo en un desfondado sueño
sin contorno
cuando pasaba el regimiento
abandonaba mis juguetes rotos
y era mi corazón
todo mi cuerpo
después
vino la bruma en espirales
un día
mi madre y los guijarros
dieron un seco ruido de infinito
el tiempo frente a mí empuñó las manos
Soltó pájaros negros en mis ojos
y un trozo de sol
cayó entre los labios
La tarde es un sollozo contenido
mi infancia
es un acuario
Lloro por
los días que perdí
y que pasaron esquinando mi vida
lloro por los días en que no anduve como otros
con las bellas muchachas
en las cálidas tardes de verano
lloro por el posible que pude ocasionar
a los que más quise
lloro por mis sublimes
por mis involuntarios
y urgentes y perentorios crímenes
lloro por el absurdo que ha significado toda mi ternura
lanzada a los cuatro puntos cardinales
y que no tuvo eco
y que se estrelló con el odio
y la mezquindad
y la ciega roca de las pobres gentes
a quienes sin embargo amo y perdono
lloro justamente por mi inconfortable ternura
celeste anzuelo
con el que también he recogido hermosas perlas}
adheridas al fondo del fango
y del abismo
Yo soy como
las plantas o los árboles
que nunca han sabido quienes son
y echan flores o espinas
o atrapan insectos
ellos están ahí simplemente
como yo en mi tierra
y no les interesa ser astronautas
ni andar apretujados en los metros
o en los autobuses de las grandes urbes
por las noches
albergan a los pájaros
o contemplan humildes el universo
recibiendo amorosamente el rocío de la madrugada
cuando mueren regresan al vientre materno
para nacer de nuevo
en cualquier forma
es bueno ser planta o árbol
porque
de ellos será el reino de los cielos
No hay nada
que agregar
Amigos míos
una nube
a otra nube
hacen la lluvia
una lágrima
a
otra lágrima
hacen el llanto
un pobre a otro pobre
hacen el pueblo
mi casa
mi familia
la intemperie
Vivimos los
días de Ana Frank
el índice es una cruz
entre los labios
Caminar en puntillas
musitar las palabras
no encender las luces
dormitar si se puede
tender el oído hacia la noche
agujereada de disparos
Soy sólo
profesor
poseo un traje gris
y una corbata;
no puedo tener novia
ni automóvil
ni casa.
Engaño
en mi función
en forma refinada
hablo del bello mundo
y de la patria,
reviso mil cuadernos por segundo,
yo
paso mi programa,
le limpio la nariz a mis alumnos
aunque nadie me paga.
Las gentes
ignorantes
me escupen en la cara,
me pisan en las micros,
me denigran, me ultrajan.
Mas, viendo
yo a los niños,
alumbra la mañana,
retórnanse a su sitio mis sentidos
sumérjome en mi acuario conocido.
Está
bien
está bien
todo está bien
sólo que el hambre mata niños
y en la oscura humedad
crecen los muertos
y sin embargo está bien todo
y es grato haber llorado entre cipreses
embriagarse de tiempo
refrescar con amigos y cerveza
las blancas noches de verano
anclar el corazón en algún puerto
incorporar un poco de sol
al alma que habitamos
entretejer de amor
las noches y los días
y sobre todo pensar
que aún pertenecemos
a esta pequeña parte de la muerte
que hemos llamamos vida